HOJA CON RUTA
Por:
Julio Schiappa Pietra
¿Puede
el futuro del Perú ser diferente para evitar irnos al abismo?
Yo creo
que si, pero sólo si se adopta el método Gareca, que se resume en: acuerdo y
conocimiento de la estrategia, mando unificado, estricto juego en equipo,
reglas claras que valen de capitán a volante, uso del talento de todos, , audacia
en la ofensiva, respeto a la capacidad ejecutiva del líder, dejando de lado ese
estilo desestructurado y anarquista que caracteriza a los peruanos y sus
dirigentes.
ESTRATEGIA CON OBJETIVOS CLAROS
Una
república se basa en el derecho, que protege a todos y brinda seguridades
esenciales para la vida de capa persona. Esa es la esencia de la democracia y
el centro de los valores republicanos, establecidos en 2,000 años por griegos y
romanos.
La
semana pasada, una ola furibunda contra una resolución no nata de la Corte
Interamericana de Derechos Humanas, nos hizo aparece como un grupo de
orangutanes que no respetan las leyes internacionales. Al final salimos muy
bien librados, con una resolución que habla de una Corte maltraída e insultada
por altos personeros de la nación, incluidos los pirañitas políticos de siempre.
Esto es lo contrario del espíritu republicano de respeto a la ley internacional
y a los tribunales.
Una
clave de la estrategia de una república es la defensa de la soberanía nacional,
sin xenofobia, pero sabiendo priorizar intereses del país. Ejemplos sobran.
Un
ejemplo negativo reciente, es la negociación, a puerta cerrada y sin testigos,
de acuerdos sobre medicamentos que eliminan las patentes de medicinas genéricas, de propiedad
intelectual y que atropellan los derechos culturales e inmateriales del país,
así como de importaciones que harán que Gamarra lance su último suspiro, junto
con miles de enfermos ante el costo de las medicinas.
La
estrategia traza los pasos a seguir para llegar a un objetivo. Una estrategia,
como la de Gareca, recomienda defender el campo propio y penetrar el del adversario,
no que el adversario tome nuestra área chica y el arco. La soberanía en la
cancha es igual a la de los países. Aquí, a veces, usamos la camiseta del rival.
MANDO UNIFICADO PARA TENER EXITO
Los
ejemplos de gobiernos exitosos se basan en un poder institucional que todos
aceptan como dice el célebre libro “Por que fracasan las naciones?”. Hay un
pacto social, confianza y objetivos que comparten el interés de gobernantes y
gobernados. Todos juegan en equipó, todos tiene talentos e intereses
diferentes, cuando se trata del interés de la nación. Esa es la base del
capitalismo de bienestar y del socialismo de mercado. Y también es la base del
pensamiento de Gareca.
En
primer lugar, el sistema político está compuesto por una miríada de partidos
locales y municipales, cientos de partidos provinciales, todos separados de los
20 partidos nacionales inscritos. La cabeza nacional se ha vuelto mas
centralista que nunca porque los partidos de ese nivel han sido expulsados de
las provincias, dispersando desde su base todo el sistema. Lo republicano es
construir pocos partidos nacionales descentralizados muy fuertes, tan fuertes,
que no pasen por los graves apuros de inestabilidad que han atravesado los
partidos de los gobiernos de los últimos 55 años. En todo el mundo los partidos
nacionales no son centralistas, en su interior lo regional tiene un amplio
espacio pluralista y democrático, salvo el Perú.
En
segundo lugar, el Congreso está divorciado estructuralmente del país, su
sistema de representación no refleja la república, la gente no tiene acceso
real a los representantes, encerrados en Lima con una agenda de comisiones de
trabajo que ocupan todo su tiempo en Lima. Además la lucha anual por presidirlas
y para elegir la Mesa Directiva hace que la política sea un ejercicio hacia
adentro y no hacia el elector. Los republicano, para lograr una mando
unificado, sería un sistema como el Parlamento de Francia: Comisiones Parlamentarias ele- gidas
cada dos años y medio, Mesa Directiva por 5 años. En el caso del Poder
Ejecutivo el Primer Ministro somete a la aprobación del Congreso un solo
gabinete por los 5 años de su mandato y produce muy pocos cambios en ese lapso.
Mando
unificado, todos conocen la estrategia, todos juegan en un mismo equipo, cada
uno con su talento o nivel de autoridad. Otro aporte del método Gareca al
progreso del esta república.
TENER EQUIPO, TALENTO Y AUDACIA
La
audacia de todos los líderes políticos de salir a la calle y unir al pueblo en
una sola causa, ante el fraude del 8 de
abril del 2000 fue una acción simbólica de extraordinaria eficacia. Dejó sin juego a una dictadura
corrupta y sangrienta que quería quedarse en el poder. Pero, sobretodo, como
todas las revoluciones populares, fue la escuela política para miles de jóvenes
y demócratas provincianos.
Similar
audacia fue la que llevó a Ollanta Humala a las cumbres de Locumba, junto con
su hermano Antauro, para demostrar que Montesinos y su gavilla de generales
corruptos eran una minoría en las Fuerzas Armadas. Acto de audacia. Uso del
talento que tenían sus protagonistas militares: una marcha armada. Comunicada a
todo el país, esa causa elevó los decibles de la protesta civil y de la
rebelión anti fujimorista.
En ambos
casos coincidieron la oportunidad de una polarización extrema contra una
dictadura, pero ninguno cuajó en un proyecto popular y de masas cuando llegó al
gobierno. Ambos líderes políticos olvidaron que la herramienta fundamental de
la política es un partido político y que relegar la tarea de construirlo es
olvidarse de la esencia republicana de la representación: servir al pueblo y a
sus intereses.
Además
,estos lideres, no supieron unir la nación detrás de una causa, que como dice
Dick Morris “es la manera de ganar todas las elecciones”. Los tecnócratas no
unen ni expresan la nación, menos aún lideran causas, ni te sirven para ganar
elecciones. Lo demuestran todos los gabinetes ministeriales desde Toledo al
presente.
Líderes
como Evo, Correa, Lula, Mujica, Bachelet
y otros, conocen lo bien que sirven sus partidos para dirigir el gobierno por
encima de todas las valles, para favorecer el interés popular. Es la ruta
republicana mas segura para seguir ejerciendo el poder, o saliendo de él, para
nadar, seguro, entre los tiburones.
Audacia, tener equipo y uso del talento de
todos, otra lección del gran Gareca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario